A principios de los años ochenta dos estudiantes de Arte comenzaron a aplicar su interés por la música y la creación experimental en grabaciones tan curiosas como los sonidos de jugueras encendidas.Bajo el elocuente nombre de Electrodomésticos, y tras musicalizar con cintas una exposición de arte en galería Bucci, el grupo ofreció sus primeros conciertos en espacios como la sala Espaciocal y el Teatro Moneda (como teloneros de Primeros Auxilios). Sus comentados espectáculos eran una propuesta de novedosa disidencia al marco artístico permitido por la dictadura: crítico y provocador, pero, a la vez, por completo ajeno al círculos de peñas trovadorescas o gimnasios rockeros. El trío se asumía como una propuesta marginal, sin posibilidades comerciales ni proyección promocional. El inicio de una historia que se plasmó en ¡Viva Chile!, su primera producción; un registro rupturista para la agitada escena nacional, pero que hizo escuela en el rock experimental con tintes electrónicos. Un registro que cumple 30 años este 2016 y que tendrá su merecido homenaje.
Carlos Cabezas y compañía fijaron un show en el Teatro Nescafé de las Artes que se dividirá en tres bloques: interpretarán parte de su catálogo clásico, nuevo material, y su álbum debut de 1986. «Hay muchos grupos celebrando 20 o 30 años, pero creemos que es algo que vale la pena hacer», explica a La Tercera su citado vocalista. La jornada se llevará a cabo el 1 de septiembre.
«Nosotros nos empezamos a sentir músicos después del segundo disco. Después nos dimos cuenta que fue muy político lo que hicimos pero nunca fue nuestro objetivo, solo pusimos ahí lo que veíamos en la calle. Una cotidianidad reciclada y sacada de contexto», agrega Cabezas sobre el álbum; un registro que en lenguaje de música electrónica y vanguardista tradujo las vivencias de la sociedad chilena de mitad de los ochentas. Una criada en la dictadura y con reducidas expresiones artística. En la velada además los acompañarán destacados djs: DJ Raff, Latin Bitman y Fantasna.
La puesta en escena estará a cargo de Iván Navarro, antiguo colaborador del conjunto y dueño de Hueso Records, sello que editará el próximo trabajo del conjunto. Las entradas estarán a la venta por sistema Ticketek en las próximas semanas.
Audios, un predicador, y un chacal
El registro además de interactuar cercanamente con la música de corte electrónica, presentó cintas de radios AM con voces de la Brujita Caramelo, Yolanda Sultana, e incluso Jimmy Swaggart. «El fin era como recontextualizar eso y recoger a la banda sonora ambiental. Eran varias cosas. El hecho de cambiar de contexto un texto, algo que tú escuchas en la calle, en la micro, en la ciudad y ponerlo sobre una base electrónica, hace que tú leas eso de otra manera. Entonces, es un ejericio relacionado artístico, y es una manera de activar ciertas alarmas en la gente o de reflejar lo que pasaba. Era un estamento político de un lenguaje muy distinto a todos los otros lenguajes que daban vuelta. Desde la izquierda a la iglesia, a milicos, todos te decían que hacer y era una manera antidogmática que se te metía por el estómago, no por el intelecto. De una manera de hacer política y conciencia del horror que vivíamos finalmente causó algún efecto», explica Cabezas a CanchaGeneral.
Otro tópico de Viva Chile que marcó precedente fue Yo La Quería, una canción inspirada en la película del Chacal de Nahueltoro de Miguel Littín: «Hay varias cosas que desembocaron en eso. Esa es una película impresionante y en la idea que la violencia está erradicada en ciertas personas: que existen los buenos y malos, y que a uno nunca le pasará eso. Cómo tener conciencia de lo que significa la violencia que está mucho más cercano de eso de lo que pensamos. Como te digo, uno piensa en que la violencia está radicada en el delincuente, como una raza especial de persona de la cual nosotros estamos aislados. La violencia es de todos los humanos y puede estallar en cualquier minuto».
