La historia de ambos parte cuando el cantante Robbie Williams decidió renovar su mansión millonaria de Holland Park, el problema es que ésta se encuentra justo al lado de la Jimmy Page.
Pero el guitarrista de Led Zeppelin se lleva muy mal con Robbie y ha interpuesto una demanda en el ayuntamiento de Londres para detener las obras que quiere Robbie. Guerra a muerte entre vecinos.
Jimmy teme que las obras podrían dañar su propia casa y que Williams sería capaz de arruinar una casa histórica como la de Page.
Robbie Williams compró su nueva casa de 46 habitaciones por 17.5 millones de libras, un precio “barato” dadas las circunstancias, ya que el propietario anterior era el fallecido director de cine Michael Winner.
Pero lo cierto es que la casa de Jimmy es una auténtica reliquia. Fue construida por el aclamado arquitecto victoriano Williams Burges y más tarde se salvó de la demolición por el poeta John Betjeman y el escritor Evelyn Waugh.
Pero a Williams, de 40 años, nada le importa. Ha solicitado permiso de obras para renovar la casa y así crear una “casa contemporánea de vida familiar”. Esto incluye hacer el cambio al jardín y la disposición interna de la propiedad, como la sustitución del techo de su estudio de cristal.
No obstante, el aclamado guitarrista hará todo lo posible porque nada de eso suceda. El músico le señaló a Rolling Stone hace unos días: “Estoy muy preocupado de los posibles daños estructurales que este trabajo haga con mi casa”. Mientras que a sus amigos, les contó que tener a Williams como vecino es horrible, “un hombre sin sensibilidad ni respeto por el arte”.