No es fácil destellar un pop tan certero y abrasador como el de Ariana Grande, uno que entre sus capas se esconden diversas profundidades cromáticas, vertiendo entre sus líneas no sólo vigor sino melodías incandescentes que llevan al pop a su límite. Tampoco es fácil lanzar 3 álbumes implacables en un tramo de dos años. Si “Sweetner” era un acontecimiento maduro y energético, en “thank u next” reinaba la melancolía vehemente y penetrante; “positions” por su lado nos invita a un frugal encuentro con la esperanza como fortaleza.
Son un total de 16 productores que invocan una colección de cuentos musicalizados: capítulos suaves y al mismo tiempo intensos, que en su fusión arman un álbum cohesivo en su más pura forma. Es en este excesivo pero importante cruce de colaboradores en que Ariana Grande encuentra posibilidades para sus desbordantes aptitudes vocales, las cuales son un instrumento que actúa como contrapunto a tales suaves y fortuitos beats.
“shut up” es el primer acercamiento a este nuevo encuentro con la sensibilidad de Ariana, uno que por su lado contrasta mucho con la espacialidad de “thank u, next”, que además de ser un álbum que claramente florecía desde el sufrimiento nos posiciona en otra dimensión musical. Por su lado, este pasaje de múltiples armonías es una introducción orquestal de casi 3 minutos, la cual se interpone de manera eléctrica a la sensual apuesta “34+35”.
Es justamente esta canción que desprende a Ariana desde su forma más directa y desenfrenada en cuanto a contenido: “34+35” es un acontecimiento que propone a la sexualidad y deseos femeninos como centro epistolar sin eufemismos. En esta ocasión la frontalidad lírica se integra con juegos de palabras que hacen que este track resuene de una forma muy interesante; si bien Ariana ya había indagado en líricas sexualmente cargadas, “34+35” -o bien “69”- es una propuesta electrificante que refresca su propio repertorio lírico.
Siguiendo su narrativa, nos encontramos con las tres colaboraciones vocales que presenta “positions” como álbum: primero “motive” con la controversial Doja Cat. Esta instancia es justamente la más blanda de las tres, ya que si bien “motive” es un tema que se acerca más al dance, la inclusión áspera de Doja Cat corta la fluidez de un tema interesante hasta ese punto. The Weekend realiza su aparición en una balada clásica de pop contemporáneo titulada “off the table”. Un dueto suave y versátil, ambos artistas se ven sublimados por su contraparte vocal en un entramado sensual y gratificante.
Por último Ty Dolla $ign aparece en “safety net”, tema que comienza con una melodía en segundo plano que nos recuerda a FKA Twigs a ratos. Si bien este acontecimiento colaborativo es interesante, no logra destacarse por sobre otros pasajes en el álbum, y es justamente este centro del LP que baja sus revoluciones para optar por una fórmula más sencilla y menos voraz.; tal es el caso de “just like magic” o “my hair”.
Si “nasty” nos invita a una travesía más ligada al R&B con tintes de pop, “love language” deambula por un neo-soul enérgico, retomando la narrativa potente que dejamos al principio del álbum. En este mismo sentido, “positions” como title-track y único single anterior al lanzamiento, posee toques de todo aquello que hace a Ariana Grande una artista intrépida e interesante: armonías celestiales, una instrumentación perspicaz y un ritmo sensual pero auténticamente vital.
Como narrativa “positions” como LP se sostiene, pero, ¿mantiene el nivel de “thank u, next”? La respuesta es negativa en todas las direcciones si comparamos este acontecimiento discográfico con su álbum anterior. Pero, esto no significa que “positions” no sea una travesía interesante por sí misma. Si “thank u, next” es una experiencia inmersiva en su totalidad, este nuevo LP destella por sus tracks individuales. “pov” destella una vulnerabilidad particular, que refresca el final de esta narrativa con una potencia vocal inigualable, pero aquella fortaleza en cada pasaje no se hace notar con tanta eficacia.
“positions” parte como una experiencia letal y que decae a ratos, pero es importante que Ariana Grande se siga manteniendo siempre al filo de sus propia experimentalidad. Las fórmulas no funcionan, pero esta nueva forma de destellar la esperanza funciona como un potencial intrínseco en su nuevo material. Aún así, Ariana Grande navega aguas del pop poco comunes, para combatir el eterno retorno de los sonidos de décadas anteriores. “positions” es un álbum divisorio, contiene en sí mismo incandescentes sucesos memorables, jugadas intrépidas y electrificantes experiencias sensoriales; pregnante en su deseo por continuar un lenguaje feroz, Ariana Grande continúa en la intensidad de su propia narrativa, una fortaleza que pocos poseen en el esquema musical del pop de gran escala.