En el tercer y último día, aún quedaban fuerzas para gastar las últimas energías dentro del Parque Bicentenario de Cerrillos. Con dos exitosas jornadas llena de nostalgia, el día domingo se preparaba para dar cierre al evento más importante del año.
El Cenco Malls Stage, se transformó en un oasis indie para recibir a la icónica banda Phoenix, quien ya ha pisado diversos escenarios en nuestro país desde hace 17 años. Con una trayectoria consolidada que abarca siete álbumes de estudio, Phoenix regresó para mostrar su último material “Alpha Zulu” y ofrecer un elegante set que estuvo a la altura de la ocasión. Su retorno fue por partida doble con un sideshow agendado ayer en Teatro Coliseo.
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Fue algo duro recibir de golpe “Lisztomania”, “Entertainment” y “Lasso” como los temas para iniciar. Uno espera que los clásicos estén a la mitad del show ó de forma posterior a un encore, pero esta jugada hizo que la audiencia reaccionara desde el minuto uno. Pero si hablamos de fusiones magistrales, Phoenix lleva la delantera en sus actuaciones, así lo hicieron con “Too Young” y “Girlfriend” mientras que más y más personas se sumaban para ser testigos de uno de los platos fuertes del festival.
Thomas Mars (voz), Thomas Hedlund (batería), Laurent Brancowitz y Christian Mazzalai (guitarras), Deck d’Arcy (en bajo y teclado) y Robin Couder (teclado y percusión) cuentan con una excelencia de alto calibre en el escenario, sincronizandose para mostrar su habilidad y talento traspasando vitalidad a sus fanáticos.
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Los acordes de “Armistice”, “If I Ever Feel Better”, “Trying to Be Cool” y “1901” fueron esenciales para resaltar lo más destacado del repertorio del grupo originario de Versalles. Para dar fin a “Identical” un agradecido vocalista desciende del escenario para saludar y despedirse de sus fieles seguidores como acostumbra hacer en algunos conciertos. Con la masa a disposición, Thomas Mars se sumerge entre el público consiguiendo sostenerse para entregarse por completo al crowd surfing. Sus compañeros, observaban a carcajadas desde la tarima hasta que finalmente fue devuelto a su ubicación bastante sorprendido.
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Sin lugar a dudas, Phoenix se destacó como una de las mayores revelaciones de la jornada, archivando una vez más su posición referente e indiscutible del indie rock y que con el pasar de los años, mantienen su estatus consolidado, siendo que son uno de los pioneros del género. Su innovación y calidad en cada nota confirman su vigencia hasta el día de hoy y que continuará prolongándose.
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