A menos de una semana de la tercera presentación de Foals en nuestro país, Fauna, productora a cargo de la realización del evento, anunció que todas las entradas dispuestas para el próximo 12 de octubre en Teatro La Cúpula fueron vendidas.
La banda inglesa de indie rock se presentará en un único show en nuestra capital. El conjunto se formó en el año 2005 en la ciudad de Oxford, Inglaterra, y está integrada por Yannis Philippakis (voz y guitarra), Edwin Congreave (teclados), Jimmy Smith (guitarra), Walter Gervers (bajo) y Jack Bevan (batería), quienes regresan a nuestro país en el marco de una gira mundial recientemente anunciada para promocionar su más reciente producción What Went Down, editada bajo el alero de Warner Music.
Foals unió su talento junto a la del productor James Ford, (Arctic Monkeys, Florence & The Machine, Jessie Ware, Mumford & Sons) para la creación de What Went Down, su más reciente registro y mismo que sirve de excusa para su aterrizaje en nuestra capital. Se instalaron al sur de Francia y comenzaron a grabar. Según las palabras de Philippakis este material ¨llega a lo más profundo de la locura y presenta algunas de las mejores canciones que la banda haya escrito jamás¨.
Una fecha cargada de alcohol y estupefacientes varios. Recordemos que en una entrevista los creadores de Inhaler confesaron que antes de pisar cualquier escenario dan rienda suelta a sus pasiones: «Es una cantidad inhumana de alcohol que se bebe. Al final de una gira el autobús se detiene en Londres y puedes tener 40 parties y hasta un par de bodas. Todo el champán se acaba con bastante rapidez, pero hay un montón de bourbon y cerveza sobrantes. Estábamos pensando en comenzar un negocio de catering de boda paralelo», explica Philippakis de actuales 30 años de edad.
«Nunca hemos hecho un concierto estando totalmente sobrios. Hay una parte de mí a la que le gustaría estar sobria No sé si sería bueno. La mayoría de las noches son demenciales. Perdí un vuelo recientemente porque estábamos borrachos. En cuanto a la forma en que operamos, no es un problema, pero el alcohol está imbuido en la banda ya que comenzamos tocando en parties en casas. Y, de todos modos, tengo el resto de mi vida para limpiarme», concluye.
Un proceso que también involucraría varias botellas, colillas, y billetes en forma de tubo es el quinto álbum de Foals, mismo que se empezaría gestar tras una fecha pactada en Hong Kong para noviembre próximo: «Queremos romper las cadenas de la familiaridad y tener esa interrogante de nuevo en el estudio. Creo que sería benéfico para la banda solo estar nerviosos acerca de estar en el estudio de nuevo. Creo que necesitamos hacer las cosas diferentes», cuenta Philippakis.
Palabras que podrían sonar contradictorias con la fuerte carga laboral de los oriundos de Oxford en los últimos meses: intensas giras y trabajos promocionales de What Went Down; algo que sí conjuga con lo expresado por el tantas veces citado Yannis Philippakis a principios de año sobre el incierto futuro de Foals, «no creo que vaya a ser para siempre. No creo que pueda. No estoy pensando en eso ahora, porque todos nos llevamos muy bien y estamos teniendo una explosión. Pero ya ha durado mucho más tiempo de lo que yo esperaba», dijo.
