Los viajes por la historia del mundo son difíciles de contar, los detalles a veces se escapan y a ratos el hilo conductor se va cortando. Pero esto no es lo que le pasa a Matteo Strukul, que en su tercera entrega de la saga de Los Médici (Ediciones B) relata de una manera fantástica y nutritiva en detalles una era de de la familia más poderosa del renacimiento.
La narración inicial de este tercer tomo de la saga – Una Reina al Poder – data en 1536, cuando la posición de Catalina de Médici es complicada, cuando los problemas en la corte son predominantes y ella se hace en el centro de las sospechas de un magnicidio que marcó la historia. El relato es fidedigno, si bien hay lagunas en la documentación histórica – como ocurre en cualquier hecho de este envergadura – las licencias que se toma el autor en la narración enriquecen la lectura y los pasajes de momentos insignes en la relación de Los Médici. La voz omnisciente y atractiva da el hincapié para todo tipo de imaginación. La narración de cada retrato de los personajes emblemáticos de la historia es perfeccionista con los rasgos físicos conocidos en la actualidad. Sin duda el trabajo de investigación fue exhaustivo.
La historia gira en torno a Catalina de Médici, entre sus complejos en la corte y su relación amorosa con Enrique II, se ve sucumbida en la debilidad, solo el rey de Francia, Francisco I, pareciera ser su soporte a su inocencia. Devastada ante tales problemas Catalina busca la ayuda de unos de los personajes más emblemáticos, y quizás uno de los más conocidos hasta la fecha, Nostradamus. La única salvación pareciera ser el hombre del que hasta el día de hoy siguen citando e interpretando en el mundo de las teorías conspirativas. Ahondar en más detalles sobre esta historia sería matar la pasión por leer, es prometedora y recomendable sin duda esta tercera y última entrega.
Sin duda, podemos decir que estamos frente a uno de los mejores tomos de esta trilogía, es de necesidad tener un bagaje en los dos anteriores para estar al tanto de detalles infaltables, pero no excluyentes para un nuevo lector. Esta es una novela coral, en donde se encontrará con cada personaje histórico, y la evolución de estos mismos es a base de hechos relevantes que se narran a lo largo de los capítulos. La adrenalina abunda, la omnipresencia es emocionante y envolvente, los relatos se hicieron escasos ante tal final de esta trilogía.