Rock clásico, jazz, folk, blues, e incluso música celta, son algunos de los géneros que Sting ha pulido en los últimos años bajo su faceta solista. Un recorrido extenso unido por un factor común: el hambre por adentrarse en estilos sonoros lo más profundamente posible, adquiriendo experiencias incalculables en cada uno de ellos. Pero en toda esta historia el ex The Police dejó de lado el pop, para ser más específicos Brand New Day (1999) fue su última incursión en los sonidos más comerciales y sin tanto predominio de afiladas cuerdas. Un capítulo que está pronto a cerrarse en su doceavo álbum.
57th & 9th fue producido por el propio mánager del inglés, Martin Kierszenbau, y trata sobre temas de contingencia en lenguaje pop; cambio climático, crisis de refugiados en Europa, y la muerte de Prince por nombrar algunos. 4 meses duró su gestación.
¿Principal inspiración? David Bowie, que en sus propios términos adquiere las características de ‘inmortal’: “Él se fue primero, y luego Lemmy, y después mi amigo Alan Rickman murió, y entonces Prince. Parecía que uno derribaba a otro. Fue un momento extraño porque piensas que estas personas son inmortales, pero de repente son como el resto de nosotros, mueren”.
“Me intriga que un gran éxito sea una luz brillante, pero también todas las luces brillantes crea una sombra oscura. Creo que la sabiduría sólo viene cuando se puede navegar por ambas. Me estoy poniendo filosófico”, agrega. 50.000 en específico es una de las canciones que habla sobre la muerte de estrellas del rock.
“El mayor motor de la migración será climático. Millones de personas buscarán un lugar seguro. Todavía estoy un poco deprimido sobre la salida de Gran Bretaña de la UE sin razón. Por lo menos la UE tiene un programa para luchar contra el cambio climático”, explica el músico de 64 años.
Además, considera la participación de Jerry Fuentes y Diego Navaira de la banda Tex-Mex, The Last Bandoleros, así como el batería Vinnie Colaiuta y el guitarrista Dominic Miller de banda en vivo de Sting. Puedes escucharlo en su integridad en este enlace (Spotify).
Otro tema que uno de los bajistas de mayor renombre en la historia no quiso dejar fuera, es su intensa relación con New York: “Pienso mucho según me muevo y es una ciudad inspiradora en la que vivir. Los peatones, el tráfico, el ruido, la arquitectura… La escala de Nueva York es muy estimulante para la mente. Los paseos son una parte muy importante del proceso”, concluye en conversación con Rolling Stone tal cual consigna PYD.