Existen modas sin sentido alguno. Como la de los vinilos; esa idea de querer tener estos discos sólo porque es la gran adquisición musical que puedes hacer pero jamás reproducirlos; el simple hecho de mostrarlos al mundo es suficiente más que escucharlos. ¿Qué clase de fans de la música son esos? ¿Por decoración?
Según una nueva encuesta realizada por el ICM (Institute Of Comercial Management), aproximadamente el 41% de los compradores de vinilo consultados aseguran poseer un tocadiscos que no usan y un 7% admite tener discos y jamás haberlos escuchados.
Hace años parecía que el CD lo había abarcadoo todo, que el vinilo era casi como una pizarra con tiza. Sin embargo el vinilo, lejos de desaparecer, se volvió a poner de moda y muchos volvieron a colocar el tocadiscos a la vista, para aparentar o quedar bien.
Afortunadamente el 52% de los encuestados restantes – es decir, poco más de la mitad- dijo poseer un tocadiscos que sí utiliza. O sea, que no todo es impostura o decoración.
La mitad de los encuestados han asegurado haber escuchado en streaming álbumes antes de comprar una copia de vinilo, sugiriendo que el streaming puede impulsar las ventas del formato. Como es lógico, si alguien puede chequear un disco sin comprarlo lo hará, y si le gusta se asegura de una buena compra.
Muchos compran vinilo por lo lustroso del formato, como si compraran una bonita lámpara o un bonito sillón. Un objeto deseable para poner en algún sitio visible. Y de escucharlo o conocer a la banda mejor no hablemos; muchos deben comprar solo por el hecho que ven poleras en la calle.
