La vestimenta en el rock es algo fundamental. Y no es que todo se agote en el asunto estético y más superficial, no: muchas veces los paños arriba de un escenario terminan siendo fundamentales, simbolizando una época, un sentir social, y en el mejor de los casos una revolución. Otras veces sencillamente quedan en la memoria colectiva por su ingeniosidad; ejemplos como Elton John en el Central Park en 1980 disfrazado del Pato Donald, o Red Hot Chili Peppers en Woodstock 94 con ampolletas gigantes en sus cabezas hablan por sí solos. Ahora a esta lista debemos sumar a una artista que el concepto estético le queda chico, St. Vincent.
En un concierto benéfico para recaudar fondos para la familia de Matt Johnson (baterista de Annie Clark), quien se recupera de un severo trastorno convulsivo comenzado en febrero pasado, la cantante salió disfrazada de un inodoro. Sin mucha claridad de qué quería simbolizar, o algún discurso de por medio, ejecutó el set en su totalidad bajo dicho concepto. Incluso se dio el lujo de estrenar una nueva canción aparentemente dedicada a su actual pareja: Cara Delevingne.
La velada contó además con la participación de grandes referentes del pop y folk actual como Father John Misty, Rufus Wainwright, Martha Wainwright, Elysian Fields, Joan As Police Woman, Nina Persson, y mucho más.
De momento los planes de St. Vincent son terminar los trabajos de producción de XX, su primera aventura en la pantalla grande. Esta pieza audiovisual es la primera película en la que Annie Clark asume un rol directivo: específicamente la está filmando y escribiendo. ¿De qué trata? son 4 películas de drama-terror, que narras historias disímiles entre sí; todos ellos con verdaderas revelaciones de la producción: Karyn Kusama (Girlfight, Jennifer’s Body), Jennifer Lynch (Surveillance), y Jovanka Vuckovic.
