Para algunos, la magia de David Bowie tenía que ver con su habilidad para nunca perder contacto con su propio enigma. Para otros, fue su alta capacidad de mantenerse atento a la realidad, mirando siempre el contexto musical, analizando y proyectando sus visiones sobre la música.
De esta forma, el Camaleón del Rock mantuvo una voz anti-establishment, que ardía constantemente como fuego de protesta. Él decía cosas que desesperadamente necesitaban ser emitidas por alguien de su estatus o, en palabras más contemporáneas, su privilegio. Sobre ese Bowie conversaremos hoy.
Después de su muerte en 2016, numerosos clips aparecieron a través de internet mostrando al Duque Blanco dando voz a las caras más ignoradas de la sociedad anglo. Usó su plataforma para decirle al mundo algunas verdades incómodas.
El más famoso de estos incidentes se produjo en 1983 cuando arremetió contra MTV por su falta de cobertura a artistas negros, revelando cómo solo los transmitían durante las madrugadas. Teniendo en cuenta que MTV era el pez gordo en ese momento, podrían haber existido severas repercusiones para Bowie, pero él no estaba contento evitando las verdades.
“Después de haber visto MTV en los últimos meses, creo que es una empresa sólida pero con mucho más por hacer”, señaló David ferozmente. “Estoy incómodo con el hecho de que pasan relativamente pocos artistas negros ¿Por qué es eso?”. La incomodidad del entrevistador, Mark Goodman, es latente. Bowie cambió los roles de la conversación y con estupenda desenvoltura, contraargumentó cada una de las incipientes respuestas de quien en ese entonces era considerado uno de los VJs fundadores de la era dorada de MTV. Mira el vídeo completo a continuación
Este incidente no fue la única vez en donde Bowie compartió su aprecio por la música de las comunidades afrodescendientes. En 1993, el Starman apareció en un programa de la NBC pero esta vez en un ambiente más ameno que el anterior.
Allí, el presentador Bryant Gumbel, recordó al cantante sobre un comentario que había hecho sobre cómo los raperos eran “los únicos músicos genuinamente creativos”. Bowie respondió, “sí, creo que es así”. Entonces, Gumbel le pregunta a David Jones si cree que el resto de artistas [blancos principalmente] se han vendido en la búsqueda de éxito comercial. Y en lugar de buscar una respuesta fácil, Bowie ofrece una matizada explicación.
“No, no creo que sea así”, sentenció antes de ahondar en un análisis contextual de lo que estaba pasando con la música. “Creo que la generación blanca ya ha llegado a su mayoría de edad, esa gente que nos trajo el rock n’ roll en su forma blanca ahora son parte de la administración. Creo que la calidad y la importancia del mensaje social se han trasladado fundamentalmente al mercado afrodescendiente e hispano. Y creo que de ahí viene la nueva fuerza de la Industria. La música blanca está fragmentada al igual que la sociedad, y esa fragmentación es un reflejo de un caos en su música. Mientras que con la música negra, hay un punto social muy fuerte. Hay una necesidad de descubrimiento y propósito.”
Finalmente, se le preguntó a Duque si creía que algunos artistas solo buscaban un éxito comercial, a lo que Mr. Jones respondió. “Es agradable pensar desde una perspectiva cínica que [mirar siempre la esfera comercial] es una buena oportunidad profesional para los jóvenes, pero no creo que lo sea”, sinceró Bowie. “Creo que todo el mundo que coge una guitarra y pone un lápiz sobre el papel tiene algo en sí mismo, que quiere expresar a los demás y desea que lo entiendan”.
El autor de Let´s Dance vivió de una manera en la que se aseguró no tener remordimientos. Sus palabras sobre la música afrodescendiente e hispana se convertirían en una visión aceptada sólo unos años más tarde, cuando la gente le dio a distintos géneros como el hip-hop, el rap, ahora último el trap y también a la música latina, el crédito que se merecían.
Bowie podía mirar más allá de las caricaturas, él veía y señalaba sus visiones sobre lo que pasaría en la música, tenía perspectivas de un siglo XXI mainstream pero de vasta impopularidad para los 90. Para el hombre detrás de la figura, habría sido más fácil no usar su privilegio para decir las verdades incómodas que apuntaban a los peces gordos, pero Bowie nunca iba a tomar el camino fácil.