El comienzo del atardecer dio paso a lo más potente combinación de rock y funk, la Familia Chilenita del Funk hizo moverse, saltar y bailar a todos los espectadores. Haciendo alusión a estos 21 años que llevan en carrera, generaron una efervescencia tal que prendió de un segundo a otro al público. Los Tetas con “La medicina”, los Chanchos haciendo de las suyas y la improvisación de Tea Time no se hicieron esperar ni un minuto.
Se dieron el tiempo de separarse por un buen rato y presentar sus temas por separado. Revolución total al momento de cantar los clásicos: “Papi dónde está el Funk” y “Corazón de sandia” de los Tetas y “Eligiendo una reina” de los Chancho.
No hay duda que entre este súper grupo se genera una combinación, o más bien, un misticismo a la perfección que genera la interacción a la par del rock y el funk con la música y el público.
El show finalizó con todos en escena, el público encendido hasta más no poder y la música haciendo el ruido más armonioso en nuestros oídos. Un show digno de una cancha general.