Cuando se escuchó la ya emblemática frase “y los ganadores son…” Foals sabía con certeza que tendrían que pararse prontamente de sus asientos. Y si bien el 2015 nos dejó varios buenos registros, el de los británicos se impuso con holgura: un sonido maduro, con la posibilidad de evocar las más disimiles emociones, eran sólo algunas de las características de “What Whent Down”. En los pasados premios NME quedó sentado cuando alzaron la estatuilla al mejor álbum del año.
Pero su líder y vocalista Yannis Philippakis no apura las cosas. Ante las insistentes preguntas de la prensa sobre cuándo tendríamos en nuestras manos un nuevo álbum de Foals, él fue categórico en señalar que no quiere apurar las cosas. No son esclavos de un sello con alcance planetario, ni mucho menos buscan dinero fácil: “Hemos sacado el disco, así que creo que nos podemos otorgar algún tiempo para descansar. Yo no creo que haya prisa en este momento. Tenemos que vivir la vida de nuevo, eso es siempre bueno para hacer un disco”.
De principio pueden sonar como palabras totalmente sabias, e incluso lógicas por parte de un conjunto que se encuentra físicamente agotado, y creativamente buscando nuevos horizontes. Pero si lo conjugamos con las mismas palabras de Philippakis emitidas hace unos meses, el resultado puede no resultar del todo óptimo: “No creo que vaya a ser para siempre. No creo que pueda. No estoy pensando en eso ahora, porque todos nos llevamos muy bien y estamos teniendo una explosión. Pero ya ha durado mucho más tiempo de lo que yo esperaba”.
Otros grandes triunfadores de la noche fueron The Maccabees, Run the Jewels, Taylor Swift, Wolf Alice, Blur y David Bowie.
Por lo pronto Foals se concentra en terminar algunos shows pendientes por todo el globo. Varios de ellos se concentran en Sudamérica durante el mes de octubre: 12, Teatro la Cúpula, Chile (entradas por sistema PuntoTicket); 14, Barranco Arena, Perú; 15, Cine Joia, Brasil; y 22 Groove, Argentina. ¿Qué viene después? Ni la misma banda lo sabe.