Un cierre bien acabado tuvo #LollaCL 2015 con Interpol, concluyendo la segunda y mejor jornada del festival. Si bien la banda vino a presentarnos su quinto disco, El Pintor, como parte de su gira promocional, el trío neoyorquino supo darle al público los clásicos que quería escuchar de sus discos anteriores Turn On The Bright Lights, Antics, Our Love to Admire e Interpol.
Partieron con un clásico “Say Hello to the Angels” para luego presentarnos “Anywhere” y “Blue Supreme”, dos de los tracks estrellas de El Pintor, temas todos que el fiel público coreó de principio en el ACER-WINDOWS 8 Stage. Destacaron las presentaciones de “Evil”, “My Desire”, “Everything is Wrong”, “Pioneer to the Falls”, y “Slow Hands”, y el cierre del encore con “Untitled”.
Cierto, no tuvo la convocatoria masiva de Calvin Harris, Kings of Leon y Major Lazer, pero eso fue precisamente la gracia de este concierto. Tras pasar dos días como parte de una masa en la mayoría de los escenarios, se agradece la cercanía que como público pudimos tener con la banda.
Así, la intimidad que ha caracterizado a los conciertos de Interpol en sus venidas a Chile no se perdió en este festival. La lejanía y lo encajonado del escenario permitió a los fans disfrutar de un ambiente más exclusivo, y dedicar más atención a los pequeños detalles, como guitarreos más alargados por Dan Kessler y ciertas innovaciones en la batería de Sam Fogarino. Y como siempre, disfrutar la voz de un Paul Banks reservado, pero que nos dedicó un par de sonrisas cuando el público le hacía bromas.
Personalmente, quedamos con ganas de escuchar “All Fired Up”, “Length of Love” y oír a Paul cantar en español con “The Undoing”. No obstante, se trató de un cierre bien hecho, con los acordes melancólicos perfectos para despedir dos días intensos y bajar las revoluciones bajo la luz tenue de los faroles de un Parque O’Higgins que nuevamente demostró su potencial para albergar grandes festivales de música en nuestro país.