Jai Paul es una misteriosa e intrigante figura; se podrá afirmar aquella sentencia apenas se revise su explosivo éxito e historia. El haberse mantenido en silencio absoluto por seis años contribuye a esta noción, o el acto de re-lanzar en junio del 2019 un álbum que data 2013, el cual se liberó casi sin alteraciones respecto al anterior, exceptuando algunos nuevos detalles tanto en la producción como en los nombres del tracklist. Pero ¿cuál es el motivo detrás de este inesperado lanzamiento?
Regresemos a sus inicios: la carrera musical de Jai Paul comenzó en un rincón del internet durante el 2007, año en que lanzó su single “BTSTU” a través de su perfil en MySpace, el cuál luego de tres años se convirtió en un hit que sacudió las radios de Inglaterra. Producto de aquel éxito firmó contrato con XL Recordings en el año 2010, re-lanzando “BTSTU (edit)”, al cual le continúo el single “Jasmine (demo)” en el 2011, conformando una díada que es considerada como las quintaesencias de su discografía. Así Jai Paul mostró al mundo que jamás ha sido un mero one-hit wonder; en ambos singles el artista esgrime un exquisito sonido que, aunque insertado dentro de la sección más experimental del R&B, se mezcla con notas de indietronica y samples con origen en medio oriente, creando un producto que cautiva por su naturaleza única e intrigante.
Luego de aquellos éxitos under se generaron altísimas expectativas por este artista, quien prometía dar un enorme salto al futuro con lo visionario de su propuesta. Un álbum, entonces, es lo que Jai Paul planeó como su siguiente jugada.
13 de abril del 2013 y aquel proyecto aún inacabado se filtró en internet.
El leak acarreó – de manera esperable – consecuencias negativas de todo tipo; la filtración en Bandcamp supuso un robo lucrativo de su propiedad intelectual, pues el álbum se encontró a la venta por más de un año en aquel sitio web. Consecuencias también en la psique del artista, pues no fue el producto final que deseó entregarnos; surgió entonces la desconfianza, los miedos, y las voces de los medios que declararon que el mismo Jai Paul fue quien filtró su propio álbum. Es comprensible entonces que el leak de su trabajo sumergió a Jai Paul en un estado de desconsuelo donde encontró refugio en el aislamiento. Un tweet aclarando que el ilícito lanzamiento no era oficial sería su última declaración pública en años, lo que daría comienzo a un prolongado hiatus que parecía nunca terminar.
Llegó entonces el 2019, y de manera imprevista Jai Paul publica dos nuevos singles: “He” junto a “Do You Love Her Now” (sencillos que fueron grabados en las sesiones del álbum filtrado), a lo que tiempo después se sumó el lanzamiento oficial de “Leak 04-13 (Bait Ones)”. Al pensar el re-lanzamiento de este proyecto es imperante destacar un factor fundamental, y es que Jai Paul parece asumir el leak de su álbum desde otro punto de vista, como una herida ya cicatrizada; quizá el título del LP sea lo que más evidencia esta nueva perspectiva, donde se apodera del leak y asume la naturaleza del mismo, escogiendo la fecha de la filtración como nombre del álbum.
El lanzamiento oficial ayudó a re-descubrir Bait Ones; sus pasajes familiares se encuentran ahora con la mejor definición posible al venir directamente de los archivos originales del artista. Así el recorrido comienza con la introducción One of the Bredrins de 11 segundos de duración; “¿Paul, is John Paul? (…) Jai Paul, one of the bredrins” dice una voz confundida, la cual desaparece para dar inmediata partida a Str8 Outta Mumbai. ¿Qué mejor manera de introducir lo singular de su sonido? La cualidad más destacable de Jai Paul es su capacidad para introducir de manera eficaz diversos lenguajes en un código simple, donde en la producción inevitablemente se filtra su ascendencia india al samplear scores de Filmi (industria cinematográfica india), elementos que confluyen de manera fluida entre el Indie y R&B que caracterizan al artista. Sonido aún fresco y efervescente que colorea a Bait Ones.
Luego de la intensa Zion Wolf Theme – Unfinished se hace más evidente como el álbum abusa del recurso de los interludios, aunque no de manera negativa, pues secciones como Raw Beat – Unfinished, Good Time, Baby Beat – Unfinished, o Chix – Unfinished nos hacen volver a pensar en la naturaleza inacabada del proyecto. Aquello nos sitúa en una poco tradicional dinámica en la que como oyentes debemos aprender a conciliar lo que esta fotografía del caos significa; captura inalterada de la filtración, donde todo permanece como se lanzó en 2013. Genevieve – Unfinished es de aquellos momentos donde el artista saca a relucir sus beats con algunas de las cadencias más catchy del LP. Jasmine – Demo es de los clásicos éxitos de Jai Paul, tema que dentro del contexto de Bait Ones funciona como perfecta calma antes de la tormenta; 100,000 – Unfinished destaca como uno de los momentos más vibrantes dentro de esta colección de temas: veloz, enérgica, y animada, es quizá la canción con más adrenalina dentro de su repertorio.
Llegando al final del recorrido suena All Night – Unfinished, quizá la balada mejor ejecutada dentro de este conjunto de temas, y la que resulta ser la mejor compañera del siguiente track, BTSTU – Demo, el cual es por lejos el tema más relevante dentro de esta colección. Esta canción de cierre, que a su vez fue la que le dio origen a la carrera musical de Jai Paul, es donde gracias a la excusa de presentar unos melosos versos románticos reluce uno de los sonidos más electrizantes e inesperadamente refinados que han acontecido en la última década.
Quizá Leaks pueda ser rechazado por algunos oídos más exigentes, pues aunque nos refiramos a este como un álbum, es necesario volver a revisar la naturaleza del mismo: Bait Ones es una compilación de canciones, en su mayoría, inacabadas. A excepción de algunos singles que se sienten más pulidos, los temas no han sufrido ninguna alteración evidente (sin considerar algunos samples que no llegaron a la versión final por temas de copyright), por lo que los descritos como inacabados han permanecido en aquel estado desde su filtración en 2013.
Al lanzamiento de este álbum le acompañó un comunicado del artista donde indica, entre otras cosas, que gracias a “terapias de varios tipos” ha podido restablecer su psique y ha podido llegar a un lugar en el que puede “comenzar a retornar a la música”. Pese a ello es imposible saber cuánto tiempo más hemos de esperar para deleitarnos con nuevo contenido de Jai Paul; aún están en la retina los seis años en los que desapareció, que de manera curiosa aportaron a que su regreso fuese más rimbombante y le introdujera nuevamente en la escena musical actual. Quizá su retorno suceda antes de lo esperado, pues dice estar mejor, dice estar en una nueva etapa, dice estar pensando en volver a componer música; y con actos nos explica que este capítulo quedó en el pasado.