Nadie podía llegar a pensar que esa joven de 12 años revolucionaría la industria musical. Esa fue la edad con la que una desconocida Lorde firmó su primer contrato con un sello musical. Se trataba del gigante Universal, que gracias a Scott Maclachlan (futuro mánager de la neozelandesa), se interesó por ella. Bajo la premisa de comenzar a componer material netamente original, la cantante publicó su primer EP “The Love Club” en Soundcloud sin esperar el resultado que estaba por venir: 60 mil descargas al poco tiempo de estar en línea.
El siguiente paso —y más lógico por lo demás— fue la edición de su primer álbum de estudio. Una vez más el destino tenía preparada una sorpresa para Ella Maria Lani Yelich-O’Connor: “Pure Heroine” vendió alrededor de 1,5 millones de copias en todo el mundo, y cosechó las críticas más alabadoras por parte de la prensa especializada, ese selecto grupo que solo alza las manos para aplaudir ciertas obras.
El resto de la historia está por escribirse, y las primeras estrofas de lo que puede ser la mejor canción de su carrera ya se desarrollan. Según publicó en Twitter la voz tras “Royals”, ya se encuentra en las etapas finales de grabación de su segunda producción. Es más; ya tiene el título de ella, aunque sólo su madre lo conoce.
Según se especula esta esperada placa podría llegar en el segundo semestre de 2016. El paso más obvio es que contará con una extensa gira mundial de promoción que incluso la tendría de vuelta por Sudamérica luego de su avasallador paso por Lollapalooza Chile en 2014.
“Tengo que tener un proyecto escrito líricamente antes que musicalmente. Así que he escrito muchas cosas maravillosas y estoy iniciando a hacer la música. No tengo fechas límite. Realmente no me importa”, explicó a mediados del año pasado.