El sol está en su punto más alto, pero calza en el perfecto ángulo para proyectar una sombra desde el escenario. En cualquier instancia uno agradecería este regalo de parte de la naturaleza, no obstante con Snow Patrol no hay intenciones de elevar las temperaturas. Todo está en manos del frío. A menos de 24 horas desde su presentación en el Teatro La Cúpula, y siete años desde su debut en tierras nacionales, el regreso de los escoceses fue una extraña mezcla de nostalgia y melancólica frescura invernal.
Desde el norte de Gran Bretaña, los cinco muchachos que componen la agrupación se elevan entre las entrañas de Lollapalooza con una de sus producciones más genéricas: “Wildness” (2018), pero no por ello menos dispuesta a entregarse por completo. Aún cuando muchos de los latentes trabajos del grupo no puedan equilibrar una sólida discografía temprana, lo que hace especial a Snow Patrol yace en su simpleza. Nada de complejas parafernalias o luces estroboscópicas. Solo melodías atrapantes y emotivas. En una instancia como un festival es difícil separar las decisiones creativas con aquellas que vienen desde los alto mandos, pero con mero contexto de la situación, la banda exprimió cada instante de su sencilla puesta en escena.
Clásicos se entrelucieron con nuevas composiciones de la banda. “Called Out in the Dark”, “Empress” y “Heal Me” fueron las encargadas de impresionar con lo que la discografía tardía del grupo tiene para entregar. Y aún con nada más que los instrumentos sobre sus manos, impregnaron un cálido movimiento de música alternativa. El líder Gary Lightbody tomo y dejo ir instrumentos mientras su congelada voz acompañadas los diversos acordes de sus compañeros.
La mezcla del escenario a ratos dejaba entrever una falta de conexión entre lo que estaba sonando en vivo y lo que debía proyectarse. Bajos sobrecargados en canciones con guitarras de protagonistas y baterías perdidas entre la multitud. Frustraciones considerables cuando se piensa en los años que muchos fanáticos llevan esperando por el regreso de la agrupación, pero que a estas alturas deben esperarse de una instancia como Lollapalooza.
Es triste, pero aún con toda la energía que los músicos venían a entregar, había algo inexistente en las miles de personas levantadas a los pies de los escoceses. Voces apagadas sin ánimo de moverse o cantar. Un ánimo de constante incomodidad que llegó a su punto cúlmine con la interpretación del éxito absoluto de la banda “Chasing Cars”. Los vitoreos y celulares no perdieron oportunidad en levantarse sobre las cabezas de los entusiasmados auditores, pero este bello episodio se vio cegado ante un gélido silencio y cientos de pies abandonando el escenario aún cuando el show no hubiera terminado.
Lollapalooza es un lugar para conocer y descubrir, pero también para curiosear. Y por más que intente quitarse de su espalda el cliché de los brillitos y las coronas de flores, son instancias como estas las que prueban el que hay bandas que no tienen como gobernar en un festival así. Una maldición que también cayó en la espalda de Jimmy Eat World hace un par de años, y que no tiene más solución que encontrar un público que esté realmente dispuesto a entregarse al máximo.
Sin darle tanto poder a los espectadores, el grupo no titubeó en ningún instante con las manos en sus melodías. “Run” protagonizó uno de los instantes más emocionales de la jornada, con las dulces guitarras raspándose con delicadeza y los lentos pulsos desenmascarando toda la pena que llevamos en nuestro corazón. “Open Your Eyes” levantó a los dormidos con su adictivo estribillo, y la explosiva “Take Back the City” inauguró como cañón los amplificadores que hambrientos estaban de decibeles.
Snow Patrol no vienen a vender entradas. No son el plato fuerte de la tarde, ni aquel que encabeza carteles. Pero si vienen a ilustrar su discografía lo harán con una gélida armonía. Melancólica y paradójicamente jovial. Con el cálido frío saliendo de sus voces mientras el sudor cae de sus frentes. Aquella música que te arropa y te acompaña en tardes de invierno. Dulce frescura que no merecemos que se mesa ante nosotros.
Setlist:
- Take Back the City
- Chocolate
- Crack the Shutters
- Empress
- Open Your Eyes
- Run
- Heal Me
- Called Out in the Dark
- You’re All I Have
- Chasing Cars
- Just Say Yes