La opinión popular dice que el rock está muerto, pero los hechos dicen que esa afirmación es totalmente errónea. Nombres como QOTSA, Arctic Monkeys, Tame Impala, Phoenix y Jack White, demuestra que no todo es oscuridad, pero hablar del término “rockstar” puede ser un tanto más difícil.
La música atraviese por una etapa sumamente limpia, en donde podemos ver personajes que antes que salir de parranda prefieren beber chocolate caliente con sus amigos, eso a todas luces societariamente es correcto. Pero según las reglas de lo que representa el rock son palabras al aire por lo bajo.
Consciente de esto, el líder de Black Sabbath, Ozzy Osbourne, le comentó a la revista Kerrang!, que no sabe quién llevará el estandarte de la música rock en el futuro, pues los grandes rockeros parece que son cosa del pasado: «Honestamente no sé quién cargará la bandera en el futuro, pero ojalá que alguien se apure. Ninguno de nosotros se está volviendo joven».
Sobre la pregunta, de quién es para él, uno de los rockstars más representativos, Ozzy sin pensar ni un segundo, contestó simplemente: David Bowie. «Siempre ha sido original con su imagen y su música. En estos días, tengo un problema identificando quiénes están en la banda y quienes son del crew, ya nadie se ve como un rockstar», afirmó.
Intentos de revivir el espíritu de la época de oro del rock han existido, pero de algo concreto aún no sabemos. ¿Cuándo llegará el día en que un baterista meta un auto a una piscina de un hotel al más puro estilo de Keith Moon? o ¿Cuándo volverá a haber una banda como Led Zeppelin que cuando pisaba territorio extranjero las chicas sabían que no sabrían más de su persona hasta 5 días más? Esperemos que esta respuesta sea contestada, y a la brevedad.
