La trayectoria de los músicos Matt, Brad, Nick, Jared, Daniel y Matthan se puede definir en dos macro-conceptos, tal como la transformación y la evolución. En este marco, la carta de presentación con la que se nos introduce la banda, es el disco homónimo del año 2008, el cual nos invita a compartir con los jóvenes Cage The Elephant, quienes fieles a sus principios reconocen la férrea e iracunda motivación de “hacer la música que nos gustaría escuchar”. En este contexto, nos dejan profundamente conmocionados por la esencia rítmica y la emplazadora lírica que no deja a nadie indiferente, en dónde los sencillos “Ain’t No Rest For The Wicked” y “Drones In The Valley”, mantienen un estilo armónico muy similar a los primeros trabajos de los británicos Arctic Monkeys, The Black Keys, y por qué no, Arcade Fire.
Desde ese punto hasta el día de hoy, Cage The Elephant nos demuestran que los años no han pasado en vano, y que los cuatro discos lanzados se transformaron en el tránsito y la consecución de ese sueño que los impulsa a crear y producir el tipo de música que ellos desean y deseaban escuchar, razón por la cual Social Cues se transforma así en la perfecta dialéctica entre la potencia como la inconfundible esencia de los nativos de Kentuky, y la nostalgia como una vuelta sublime a lo emotivo.
A modo de radiografía, el quinto disco lanzado por Cage The Elephant consta de 13 tracks, en los cuales la melancolía se posiciona como el axioma central de la propuesta lírica, ya que plasma gran parte de las dificultades que han atravesado los miembros de la agrupación Norteamericana, siendo la situación particular de Matt Schultz, la piedra angular que da forma y direcciona las líricas de Social Cues, esto a razón del tránsito por las emociones más oscuras derivadas del fin de su matrimonio con Juliette Buchs, la repentina muerte de su primo, y también el suicidio de uno de sus amigos más cercanos. Para profundizar sobre este tema conversamos con Nick Bockrath, quién nos comenta que “Social Cues tiene un carácter emocional, profundo y personal (…) Siento que la creación y producción de este disco nos unió como hermanos. Si bien, no tengo tanta influencia en la creación de las letras, este disco está producido desde lo genuino”.
Siguiendo con esta radioscopia del último lanzamiento de Cage The Elephant, Nick comenta que esta semana retomaron el tour que próximamente los traerá a Chile, sobre esto, es provechoso reconocer otra consideración artística que posee Social Cues es la irrupción del ala performática casi teatral, la cual está contenida en la esencia e identidad del personaje central del presente álbum. Sobre esto, Nick nos relata que “la idea fue de Matt, todo esto comenzó con una leve obsesión que tuvo con los programas de televisión sobre asesinos, psicópatas, entrevistas a asesinos seriales”. De este modo, el ala performática viene siendo una especie de personificación de la impresionante dialéctica que oscila entre lo meditabundo e impetuoso. Ante esto, Bockrath reconoce que la identidad del personaje “representa a una persona vacía, seria, horrible, (…) lo pienso como una crítica al día a día, al mundo en que vivimos”.
Es por esta razón, que la arista dramatúrgica no sólo configura al personaje que le da sentido a Social Cues, sino que también articula un axioma teatral que reformula una producción musical, casi como una renovación al carácter de Cage The Elephant en inspiración a David Bowie y Ziggy Stardust. Ante esto, es inevitable no retomar la idea de que las líricas apuntan a lo efusivo y conmovedor de la resignificación de las experiencias adversas en la sublime esperanza, es decir y sin mayor vacile, la vuelta de la frustración a lo emocionalmente catártico. Debido a esto Nick reitera que “Esa es la magia de producir desde el respeto entre nosotros, si bien yo no tengo mayor influencia en las letras, pienso que desde ese respeto entre hermanos nos da la libertad a todos de crear desde las experiencias difíciles, (…) sin ser juzgados, es por esto que de alguna manera, pienso que este disco nos unió en lo profundo, en la hermandad”.
En lo que respecta a las próximas fechas y presentaciones, Nick nos comenta que se sienten profundamente emocionados de retomar presentaciones, y más particularmente de volver a Chile en marco de la décima edición de Lollapalooza, señalando que “Cuando nos avisaron que volveríamos a Chile todos gritamos “¡WOOOOW CHILE, GENIAL!”, porque sentimos que en Chile está el público más cálido, un público muy loco (…) siempre es un honor volver”. Sobre esto, Bockrath reconoce no estar muy informado respecto a la situación política y social del país, pero sin lugar a dudas “queremos que todos pasemos un momento agradable, compartamos y nos volvamos a encontrar (…) no nos vemos del año 2017 supongo”.
Sobre sorpresas, Nick nos adelantó que “vamos a tocar todas las canciones de nuestro último disco, como Ready To Let Go y Social Cues”. Por otra parte, al abordar sutilmente sobre la nueva versión de Broken Boy, sencillo que cuenta con la colaboración de Iggy Pop, Bockrath únicamente nos comenta que “Es un agrado trabajar con Iggy, es un hombre increíble, (…) estamos muy agradecidos de haber compartido con él en el estudio (…)fue una oportunidad de aprender con un visionario en lo poético, en lo visual y lo musical”.
Sin embargo, Bockrath no nos dio mayores detalles sobre la presentación que realizará la banda el Viernes 27 de Marzo en la próxima edición de Lollapalooza. Ante lo conversado con Nick nos quedamos con enormes dudas tipo ¿Existen posibilidades reales que Iggy Pop sea la gran sorpresa de Cage The Elephant?, ¿qué de nuevo nos traen en esta tercera presentación de los Norteamericanos en tierras del siempre bien ponderado “Baila Pikachú”? Son miles las preguntas que nos quedan, pero que sin duda tendremos que esperar hasta la presentación de Cage The Elephant para resolver nuestras dudas. Sin embargo, lo que sí es seguro es que los nativos de Kentuky nos dejan siempre con las ganas de bailar, cantar, gritar escuchando todos y cada uno de sus éxitos.