“Conocimos a muchas mujeres de desaparecidos y ellas venían con fotografías de sus seres queridos”, vociferaba Bruce Springsteen al recordar uno de los conciertos de mayor relevancia en el cono sur: Amnistia Internacional de 1988. “Fue un momento que se queda conmigo para siempre”, agregaba. “Es un honor estar aquí y lo digo con humildad. Victor Jara vive”, fueron las últimas palabras que pronunció antes que los primeros acordes de Manifiesto se escucharan en todo el Movistar Arena. Una posta imborrable para el debut del músico en nuestro país, debut que tuvo poco de ello: la relación con Chile fue siempre estrecha, la gran consciencia social de “The Boss” echaba por piso cualquier frontera terrestre.
Abril de 2016 y Springsteen sigue intacto en su esencia: no haciendo vista ciega de los problemas que rodean el mundo y específicamente su país. A punto tal que el guitarrista canceló uno de sus shows en Carolina del Norte tras enterarse que recientemente el estado aprobó una ley en contra de la comunidad LGBT (Lesbianas, Gays, Bisexuales, Transgénero).
Las razones de la decisión fueron explicadas en detalle por el compositor través de su cuenta de Facebook. Esta nueva ley dicta que la gente transgénero que no ha pasado por un proceso quirúrgico y legal para cambiar de género no tiene derecho legal bajo la ley estatal de usar baños públicos del género con el que se identifican.
“Como ustedes mis fans lo sabes, tenía una fecha programada para Greensboro en Carolina del Norte este domingo. Como también saben, Carolina del Norte acaba de aprobar HB2, a lo cual los medios se refieren como la ley de “el baño”. HB2 -oficialmente conocida como el Acto de Seguridad y Privacidad de Facilidades Públicas- dicta qué baños se les permite usar a la gente transgénero. Tan importante como eso, la ley también ataca los derechos de los ciudadanos LGBT, cuando traten de demandar cuando sus derechos humanos sean violados en sus áreas de trabajo. Ningún otro grupo de personas en Carolina del Norte sufre tal discriminación. En mi mente, es una intento de la gente que no puede asimilar el progreso de los derechos humanos de todas las personas. Ahora mismo, hay muchos grupos, negocios e individuos en Carolina del Norte que trabajan para oponerse y superar estos logros”, enfatizó.
“Tomando todo esto a consideración, siento que este es el momento para mi y para la banda de mostrar nuestra solidaridad en contra de estos luchadores por la libertad. Como resultado, y con las más sinceras disculpas hacia mis dedicados fans en Greensboro, hemos cancelado nuestro show programado para el 10 de abril. Algunas cosas son más importantes que un concierto de rock y esta pelea en contra del prejuicio y la intolerancia -lo cual está sucediendo al momento en el que escribo- y este es uno de ellos. Es uno de los mayores motivos por los que estoy levantando mi voz en oposición de de aquellos que continúan empujando hacia atrás en vez de hacia delante”, concluyó.
La gira de Bruce Springsteen continuará a partir del 12 de abril en el Schottenstein Center, en Columbus, Ohio.