Por Salvador J. Leiva
2018 es el año en que un disco tan categórico como ‘In the Aeroplane Over the Sea’ de Neutral Milk Hotel cumple 20 años. Un disco quizá desvalorizado en la época que fue lanzado: 1998. Ese año en que Chile se paralizaba completamente por una Selección de Fútbol que llegaba a una copa mundial en Francia por primera vez en mucho tiempo. Desde la vereda musical del 98’, el público prefería coletazos electrónicos como el que dio Fatboy Slim con su ‘You’ve Come a Long Way,Baby’, o se dejaba querer por ese trío de raperos blancos llamado Beastie Boys con su elepé ‘Hello Nasty’ o otros preferían el encanto agresivo y controversial de Marilyn Manson con su ‘Mechanical Animals’.
‘In the Aeroplane Over the Sea’ fue el segundo disco y final de Neutral Milk Hotel lanzando un 10 de Febrero de 1998, que poseía canciones encantadoras y agresivas a la vez como las tres partes de ‘The King of Carrot Flowers’, o la icónica canción que da título al disco, siendo tan simple y tan memorable que uno se preguntaba cómo ésta lograba ser tan buena con los simples acordes (Sol-Mim-Do-Re) de la que está formada. La pieza número tres del tracklist llamada ‘Two-Headed Boy’ es poderosa aunque sea solo una canción de guitarra acústica y voz. ¿La razón? La pasión que Jeff Mangum entrega al rasguear la guitarra, como también en su manera al cantar. Misma suerte corre para ‘Oh Comely’, que aparece varias canciones después, siendo la pieza más larga del álbum, con más de ocho minutos de duración.
La corta pero instrumentalmente intensa ‘The Fool’ lleva al auditor a tiempos remotos como en los de la conocida película ‘Pandillas de Nueva York’. Si hay una definición para lo que punk mezclado con música folk refiere, esta sería ‘Holland, 1945’: baterías saturadas, guitarras acústicas rasgueadas a gran velocidad y un bello desorden. ‘Communist Daughter’ es un bonito interludio lleno de sonidos, como si fuera parte del compilado de la música más experimental hecha por los Beatles. La que tiene más raíces tradicionales de Estados Unidos, citando la americana y hasta el country es ‘Ghost’, aunque con un giro de tuerca más distorsionado y cargado a los instrumentos de viento. ‘Untitled’ es una locura escocesa hecha canción, con una melodiosa gaita siendo apoyada por instrumentos saturados en una jocosa sintonía. Finalmente, la voz de Mangum y su guitarra acústica llegan para cerrar el disco de una manera muy emocional, con ‘Two-Headed Boy Pt 2’.
¿Y que opinaron los medios de éste trabajo? La prensa elogió el disco por su rica instrumentación llena de coloridos matices, y también su lírica surrealista y sugerente, abordando la juventud y la muerte como temas recurrentes, siendo ambos tópicos relacionados con la famosa Ana Frank. El mismo letrista, cantante y compositor Jeff Mangum ha relatado a diversas fuentes que su inspiración fueron diversos sueños que tuvo acerca de la famosa niña del Holocausto Judío. Una niña que pudo haber vivido tantas cosas, pero que su vida fue repentinamente silenciada.
“Y un día moriremos,
Y nuestras cenizas volarán desde el avión sobre el mar.
Pero por ahora somos jóvenes,
Déjennos tumbarnos al sol,
Y contar cada cosa hermosa que podamos ver.”
‘In the Aeroplane Over the Sea’ es un disco de folk. Sólo un disco de folk apreciado en su tiempo principalmente por el círculo independiente, haciendo que muchos críticos de música se rascaran la cabeza pensando si poner este álbum o no en sus listas de los mejores discos de la década de los 90s. Sin embargo, Jeff Mangum y compañía tuvo su revancha: en tiempos recientes, el disco fue haciéndose más y más conocido a través del Internet, ganando cada vez más adeptos y también dejando a este álbum en un estatus de culto.
Indudablemente, ‘In the Aeroplane Over the Sea’ resulta ser una obra que logra trasladar al oyente a otros tiempos y lugares, como si fuera un libro que está en una estantería siempre esperando a ser releído una y otra vez. Como si fuera una pieza que perdura para siempre, cosa tal de un manual para hacer momentos inolvidables que perduran en el tiempo. Y así, la figura de Neutral Milk Hotel y su más célebre trabajo se sigue acrecentando y ganando adeptos, y ciertamente lo seguirá haciendo con el paso del tiempo.