The Raconteurs ha vuelto, de aquello no hay duda. Tras 11 años en el silencio “Help Us Stranger” entró como el inesperado regreso de la agrupación icónica de principios de los 2000. No podemos esperar que en más de una década las cosas sigan iguales, tampoco podemos esperar que Raconteurs sigan iguales. Este giro hacia la madurez y el contexto global hiper conectado han hecho que las experiencias en vivo sean diferentes: pantallas y más pantallas hoy se interponen entre los que nos entregan la performance y los espectadores ¿Cómo enfrentan esta situación? Un Phone-Free Show.
La experiencia humana 1:1 es una de las aristas más importante al referirnos a un show en vivo, una experiencia privilegiada en donde la música no está contenida en tu aparto de reproducción, más bien te enfrentas al acontecimiento musical sin barreras. Esta forma de entender la música se ha hecho pregnante en medida en que los artistas no necesariamente ganan un salario por las ventas en bruto de sus formatos físicos, sabemos que el streaming de igual manera se ha apoderado de la manera en la que consumimos álbumes. Para prevalecer como músico, los tours son la manera de sostenerse, sometiéndose a meses o años de shows día tras día. Este lo vive Raconteurs y aquella experiencia humana se ve agotada por la insaciable sed de documentar cada minuto de nuestras vidas.
El cuarteto ha sido tajante de una manera necesaria, no habrá celulares ni dispositivos que puedan capturar imágenes, grabar vídeos o audio. Esta iniciativa por supuesto nace de Jack White, quien fue el primer artista en 2015 en su Lazaretto Tour en contar con un show libre de dispositivos electrónicos, intención que ha extendido en cada proyecto que vuelve a los escenarios. “Creemos que disfrutarán mirar fuera de sus dispositivos electrónicos por un momento y experimentar la música y nuestro amor compartido por ella EN PERSONA. Disfruta sin celular, 100% experiencia humana“. Así se lee la descripción de cada evento en este tour que promociona su tercer LP “Help Us Stranger”.
Tal como demuestra la ilustración, una pequeña bolsa reciclable YONDR bloquea el dispositivo en el interior, siendo posible desenfundarlo solo con una pieza de desbloqueo específica que se encontrará en puntos estratégicos dentro del reciento, puntos los cuales serán establecidos por la producción. Por supuesto The Raconteurs no priva a su audiencia de un registro fotográfico del concierto, si no cuentan con su propio fotógrafo que además de documentar todo el show, proporciona a los fans con la posibilidad de comprar impresiones a través de la página web. Puedes adquirir una ampliación fotográfica análoga con papel Silver Gelatin, procesadas a mano en Third Photo Studio en Nashville en el headquarters de TMR, impulsando así la fotografía desde lo analógico y como un objeto de arte que acerca la experiencia a tus manos. Además de esta única impresión, la banda ofrece un catálogo descargable con imágenes de todos los shows, las cuales puedes obtener de manera gratuita ingresando a su banco de fotografías.
Esta estrategia impulsada por White y también utilizada por artistas como Childish Gambino o The Lumineers, ha sido clave para cuestionar nuestro propio uso de dispositivos electrónicos en experiencias musicales como éstas. La intención no es privar a los receptores de la experiencia fotográfica que pueden adquirir de manera profesional en su web o en redes sociales, más bien poder compartir un show no mediado por pantallas. Lo importante aquí es la experiencia, sumergirte en la atmósfera que entrega Raconteurs -o bien cualquier artista que veas en vivo- y ver con tus propios ojos lo que acontece a tu alrededor. No necesitamos el infinito registro sin sentido y en mala calidad de lo que percibiste en su show, necesitamos conexión real, y eso es justamente lo que vamos a vivir este 13 de Noviembre. Apaguen sus pantallas y disfruten la experiencia.